Los factores emocionales están implicados en la aparición de las cefaleas tensionales. Las relaciones existentes entre éstas y los trastornos emocionales, como es el caso de la ansiedad y de la depresión, son propósito de este estudio y de otras muchas investigaciones. El padecer un trastorno emocional influye en la percepción del dolor y el padecer un dolor de manera crónica, afecta también al estado emocional.
M. C. Sánchez, M. I. Comeche y M. A. Vallejo, pretenden probar la eficacia del Biofeedback EMG (músculo frontal), en el tratamiento de 5 pacientes diagnosticados con ansiedad y 5 pacientes con diagnóstico de depresión que padecen a su vez, cefalea tensional crónica. A pesar de estar siendo tratados de su trastorno emocional primario, no han experimentado mejoría en relación al dolor de cabeza.
El entrenamiento se llevó a cabo a lo largo de 10 sesiones, con una frecuencia de una sesión semanal de aproximadamente 30 minutos cada una de ellas.
Tras finalizar el estudio, estos autores concluyen que el entrenamiento en Biofeedback EMG frontal, ha resultado ser eficaz en el tratamiento de dolores de cabeza de origen tensional ya que se produce una disminución en la tensión muscular frontal.
Se comprueba que:
∙ disminuye la duración y la intensidad del dolor
∙ disminuye la predisposición ansiosa, relativamente estable, a percibir ciertos estímulos como amenazantes (nivel ansiedad-rasgo)
∙ mejora la calidad de vida en ambos grupos
∙ mejora el estado de ánimo en los pacientes diagnosticados con depresión
Información obtenida de:
http://revista.sedolor.es/pdf/1999_01_04.pdf
Miriam Benavides
Neuropsicóloga